Anticípate a los posibles imprevistos

¿Cómo actuar en caso de incendio? ¿Dónde se encuentran las salidas de emergencia? ¿Hay que tomar alguna precaución en el alojamiento? ¿A quién contactar en caso de urgencia? Aunque lo ideal sería que los turistas nunca tuvieran que plantearse estas cuestiones, lo cierto es que un imprevisto puede presentarse en el momento menos pensado. Y para que estos inconvenientes no arruinen las vacaciones, ¿por qué no asegurarse que el alojamiento cuenta con todas las medidas de seguridad?

Porque la experiencia final de los huéspedes es el objetivo prioritario de los profesionales del alquiler vacacional, la clave radica en anticiparse a los posibles imprevistos y prever una solución ajustada para cada caso.

En Muchosol hemos recopilado las medidas de seguridad que toda vivienda vacacional debería contemplar. Unos consejos que pueden marcar la diferencia entre un susto sin importancia o un mal sueño, ¡toma nota!

¿A quién contactar?

Tener a mano una lista con los teléfonos de emergencia locales siempre ayuda: la policía local, el centro de salud más cercano, la ambulancia, los bomberos, etc. El tiempo de reacción en estos casos juega un papel crucial, de ahí la importancia de facilitar esta información para que los clientes puedan actuar de inmediato.

El propietario también debe proporcionar un número de contacto en caso de emergencia y un número adicional. Los clientes deben saber que durante su estancia en el alojamiento, con independencia de la hora a la que se produzca la emergencia, la agencia estará a su servicio para resolver cualquier duda.

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Primeros auxilios

Todo alojamiento vacacional debería contar con un botiquín de primeros auxilios con los medicamentos y materiales imprescindibles. En vacaciones son habituales los accidentes sin importancia como pequeñas heridas, cortes o quemaduras, que generalmente pueden tratarse sin tener que acudir al servicio de urgencias.

En el caso de los alojamientos ubicados tanto en la costa como en la montaña, el botiquín no debería estar expuesto a temperaturas extremas porque puede afectar a la eficacia e integridad de su contenido. Y un último consejo ligado a los primeros auxilios, nunca está de más indicar el número de teléfono para averiguar cuál es la farmacia de guardia.

Las salidas de emergencia

Todo alojamiento debe contar con un plano de la vivienda que muestre claramente dónde se ubica la salida de emergencia. En el caso de las viviendas que forman parte de complejos más amplios, como en el caso de los bloques de apartamentos o las residencias de casas unifamiliares, debe quedar claro cuál es el protocolo de evacuación para abandonar el recinto.

No hay que olvidar que las salidas habituales de uso del público en general y las salidas de emergencias no son las mismas, de ahí la importancia de fijar de antemano un plan detallado para estos casos excepcionales. Una buena opción consiste en aprovechar los espacios más transitados, como los pasillos, las escaleras y los ascensores, para señalar las instrucciones a seguir en caso de evacuación.

La distancia máxima ideal entre cualquier punto de la vivienda y un medio de salida al exterior nunca debiera superar los 30 metros. Esta recomendación adquiere una mayor relevancia en el caso de las personas con movilidad reducida, por lo que puede resultar aconsejable reservarles los alojamientos más próximos a las salidas de emergencia.

Problemas energéticos

Aunque las viviendas de nuestros días son cada vez más inteligentes, los problemas energéticos son imprevisibles y en cualquier momento puede irse la luz, sufrir una pérdida de agua o encontrar problemas con la climatización. Aunque el responsable último de solucionar todos estos problemas siempre es el propietario del alojamiento, en ocasiones podemos prevenir estos contratiempos si explicamos cómo funcionan los principales electrodomésticos: la lavadora, el aire acondicionado, la televisión, la cocina y el horno, el calentador, etc.

También puede ser muy interesante indicar dónde se encuentra el cuadro eléctrico para encontrar la solución rápidamente en casos de emergencia como apagones. Lo ideal es incorporar las típicas pegatinas junto a cada interruptor para poder detectar de un vistazo dónde se encuentra el problema.

Prevención de incendios

Cada alojamiento debe contar con un detector de monóxido de carbono y de una alarma de incendios. Aunque la normativa de seguridad difiere ligeramente en función del país, en la mayoría de las ocasiones las exigencias serán muy similares. El propietario debe realizar periódicamente los test de calidad y cambiar la batería para asegurarse de que todo funcione correctamente.

Del mismo modo, en función de la superficie de la vivienda habrá que incorporar un número determinado de extintores en perfecto estado de funcionamiento y mantenimiento. Y si en el alojamiento está prohibido fumar, conviene recordarlo a los clientes con carteles informativos en las zonas más frecuentadas.

Atención a los más vulnerables

Todo alojamiento vacacional que se encuentre en el mercado debe respetar las medidas de seguridad indispensables para acoger a los miembros más vulnerables de la familia, los niños y los mayores. Antes de alquilar una vivienda hay que revisar a conciencia cualquier zona para evitar que los huéspedes puedan tropezarse o caerse. Del mismo modo, debemos asegurarnos de que las escaleras sean seguras y tengan barandillas, así como evitar que los cables estén a la vista.

Lejos de atemorizar a los turistas con todos estos detalles y consejos, la entrada en la vivienda es el mejor momento para explicarles todas las claves para solventar los posibles problemas que puedan surgir.

Del mismo modo que el cliente debe respetar la propiedad y dejarla en el mismo estado en el que le fue entregada, el propietario o gestor del alojamiento es el único responsable de la calidad de los servicios contratados. Velar por los más altos estándares de hospitalidad y seguridad será la mejor carta de presentación frente al cliente. ¿A qué estás esperando para tomar nota de estos consejos y sacar un mayor partido a tu vivienda vacacional?